Corpus Christi

Sede: Procesiona desde la Santa e Insigne Iglesia Catedral Magistral de los Santos Niños Justo y Pastor hasta la Parroquia de Santa María.

Procesiona: El domingo siguiente a su festividad, el jueves siguiente al de la Santísima Trinidad, es decir 60 días después del domingo de Resurreción.

Custodia: Se trata de una custodia de las llamadas de “asiento” o procesional de principios del siglo XVII, de pequeño tamaño, que se guarda en el Museo Catedralicio. Esta labrada, posiblemente en Madrid, en plata sobredorada y latón dorado, de tipo turriforme y formada por tres cuerpos escalonados y decrecientes, de 87 cm de altura, 34 cm de ancho y 34 cm de profundo, ajustandose por lo tanto a la tipología y proporciones establecidas por el maestro Juan de Arfe. El primer cuerpo es de planta hexagonal con basamento decorado con espejos y cartelas sobre el que se elevan seis columnas corintias que se unen en arcos de medio punto, en la base de las columnas se sitúan las imágenes de seis apóstoles, en su interior es donde se coloca el viril con el Santísimo Sacramento. El segundo cuerpo es un templete circular con un alzado semejante al anterior pero con columnas jónicas en cuya base van situadas las pequeñas imágenes de 6 apóstoles, en su interior va situada una imagen de Cristo Resucitado. El tercer cuerpo, también de planta circular, esta formado por seis ventanas rectangulares en cuyo interior se situó, en tiempos, un relicario con las Santas Espinas. Culmina en una cúpula semiesférica rematada con una cruz añadida en el siglo XVIII sustituyendo el remate primitivo.

Por la forma, disposición y mezcla de estilos de las columnas hay autores que ven en esta custodia una posible interpretación del Templo de Salomón.

Aunque hay algunas hipótesis, su autor es desconocido y se piensa fue un encargo del Cardenal Arzobispo de Toledo Sandoval y Rojas para el Templo Magistral.

Forma de portar el paso: Depende del año: anderos, costaleros o ruedas

Acompañamiento musical: Agrupación Musical

Exorno floral: Variable según los años, normalmente predomina el color Blanco

HISTORIA

Aunque no existe cofradía como tal que le de culto, el día del Corpus Christi en Alcalá es un día grande donde todas las Cofradías, asociaciones, Casas Regionales, autoridades civiles y religiosas acuden a adorar a Cristo presente en la Eucaristía.

Tradicionalmente se celebraba el día de su festividad, esto es, el jueves siguiente al de la Santísima Trinidad, pero actualmente se traslada al domingo inmediatamente posterior.

Desde 2010 en la procesión del Corpus también procesionan, al modo de otras ciudades españolas, los Santos Niños Justo y Pastor, por su gran testimonio de fe, y San Diego de Alcalá, por la gran devoción que tuvo a Cristo en la Eucaristía.

A fines del siglo XIII surgió en Lieja, Bélgica, un Movimiento Eucarístico cuyo centro fue la Abadía de Cornillón fundada en 1124 por el Obispo Albero de Lieja. Este movimiento dio origen a varias costumbres eucarísticas, como por ejemplo la Exposición y Bendición con el Santísimo Sacramento, el uso de las campanillas durante la elevación en la Misa y la fiesta del Corpus Christi.

El origen de la fiesta del Corpus se debe a Santa belga Juliana de Mont Cornillón. Desde joven, Santa Juliana tuvo una gran veneración al Santísimo Sacramento. Y siempre anhelaba que se tuviera una fiesta especial en su honor. Este deseo se dice haber intensificado por una visión que tuvo de la Iglesia bajo la apariencia de luna llena con una mancha negra, que significaba la ausencia de esta solemnidad.

Juliana comunicó estas apariciones al obispo de Lieja, que se impresionó favorablemente y, como en ese tiempo los obispos tenían el derecho de ordenar fiestas para sus diócesis, invocó un sínodo en 1246 y ordenó que la celebración se tuviera el año entrante. La fiesta se celebró por primera vez al año siguiente el jueves posterior a la fiesta de la Santísima Trinidad. Más tarde un obispo alemán conoció la costumbre y la extendió por toda la actual Alemania.

El Papa Urbano IV, por aquél entonces, tenía la corte en Orvieto, un poco al norte de Roma. Muy cerca de esta localidad se encuentra Bolsena, donde en 1263 o 1264 se produjo el Milagro de Bolsena: un sacerdote que celebraba la Santa Misa tuvo dudas de que la Consagración fuera algo real. Al momento de partir la Sagrada Forma, vio salir de ella sangre de la que se fue empapando en seguida el corporal.

El Santo Padre movido por el prodigio, y a petición de varios obispos, hace que se extienda la fiesta del Corpus Christi a toda la Iglesia fijándola para el jueves después de la octava de Pentecostés.

Las procesiones con el Santísimo Sacramento por las calles se hicieron bastante comunes a partir del siglo XIV.

En España se expandió la celebración del Santísimo Sacramento en los años comprendidos entre 1314 y 1355. Muy posiblemente fuera en estos años cuando comenzó a celebrarse la procesión del Corpus por las calles de Alcalá de Henares.